a México donde es recibido y atendido personalmente José Vasconcelos, rector de la Universidad Nacional Autónoma de México y vocero en ese país de la oposición al régimen gomecista. En dicho país, concibió Ravell un plan para regresar a Venezuela para asesinar a Gómez; acompañándolo en esta aventura el coronel mexicano Manuel Oreamuno Berrocal. No obstante, a los pocos días de haber llegado a territorio venezolano bajos nombres falsos, Ravell y su compañero fueron capturados, torturados y llevados al castillo Libertador de Puerto Cabello en 1923. Berrocal murió al poco tiempo de su detención, mientras Ravell permaneció encarcelado hasta la muerte de Gómez en diciembre de 1935.